JOSEFINA VAZQUEZ MOTA, CANDIDATA PRESIDENCIAL

·         Antonio Solá, asesor de JVM

·         Tregua del crimen organizado

·         Duros ataques a PRI y PRD

Javier Rodríguez Lozano

Josefina Vázquez Mota se convirtió este domingo en candidata presidencial del Partido Acción Nacional (PAN) al derrotar con 55% de la votación a Ernesto Cordero (38%) y Santiago Creel (6.1 por ciento). La sorpresa no fue este resultado que estaba en todas las mediciones mercadotécnicas y en las que también se equivocó el ex delfín del foxismo Creel Miranda, cuando decía que “las encuestas son como los toros: no tienen palabra de honor”... Pero éstas sí la tuvieron.

La sorpresa real fue la subida a twitter de una fotografía difundida en el portal del periódico El Universal, donde presuntamente aparece el publicista español Antonio Solá con Vázquez Mota, revisando el discurso que pronunciaría más tarde en la sede panista, al recibir oficialmente la candidatura presidencial. Por supuesto que es una sorpresa y mayúscula, ya que el publicista ibérico, procedente del Partido Popular (PP) de los conservadores José María Aznar (1996- 2004) y Mariano Rajoy, hoy presidente de España, con la ayuda de Elba Esther Gordillo Morales y su partido magisterial al neutralizar a Roberto Madrazo, hizo ganar en 2006 a Felipe Calderón, con la frase: “AMLO es un peligro para México”. Ya visionariamente, el compañero reportero Roberto González Pérez –integrante de una memorable dinastía de periodistas— comentaba hoy en Facebook que si ganaba Ernesto Cordero sería una muy mala señal, porque su imposición podría suponer el riesgo de fraude electoral para el próximo mes de julio. Ponderaba entonces lo saludable que sería el triunfo de Josefina Vázquez Mota y en ello, este reportero coincidió. Ahora el panorama se modifica porque no se conocía el dato de la presencia del publicista español en la mesa de asesores de la hoy candidata presidencial panista. Esto hace pensar a muchos que lo que sigue puede ser una tremenda campaña presidencial, en la que se produzcan virulentos ataques contra los candidatos presidenciales del Partido Revolucionario Institucional (PRI) y del Movimiento de Regeneración Nacional  (MORENA), inventado por Ricardo Alfonsín en 2010 en Argentina, pero “importado” por Andrés López Obrador. Esos ataques podrían ser muy similares a los puestos en práctica en Jalisco por Francisco Javier Ramírez Acuña en 2006, cuando acusó a través de la revista Proceso al candidato priísta Arturo Zamora Jiménez de nexos con el crimen organizado, como sucede en estos momentos contra Manuel Cavazos Lerma y otros dos ex gobernadores priístas. Por ahí podrían ser los principales ataques políticos que veríamos en las próximas semanas y meses en los que también el PRI y el PRD podrían ser acusados de negociar con las dos principales fuerzas de ese crimen organizado –el cartel de Sinaloa y los Zetas— por la tregua que se producirá entre ellos a pocos meses de los comicios. Los partidos políticos tendrán que echar mano de bufetes jurídicos de la talla de los Velázquez, Carrancá, Baillet y algunos otros más, con probada capacidad de respuesta inmediata, pero no como los que defienden al aspirante a senador por el PAN en Aguascalientes, Martín Orozco Sandoval, claro. Habrá que mantener la serenidad e intacta nuestra privilegiada capacidad de asombro. PD, qué grato ver que las redes sociales ganaron la nota a los medios tradicionales.